Una perspectiva es un territorio
y tus emociones. Y consciente o inconscientemente siempre estamos viviendo desde
alguna: un día te levantas dentro de la perspectiva de la víctima, otro dentro de la del
niño feliz, de la del héroe, de la de la nube gris....y eso marca tu día, tu sentir, tus
decisiones.....
En coaching sabemos que
vivir ciertos momentos o situaciones que son un desafío para ti es un ejercicio creativo
y de exploración de nuevas posibilidades fabuloso.
Piensa en algo que te entusiasme o que te traiga una sonrisa. Puede ser el mar, o un
simple trozo de chocolate, y métete ahí. Por ejemplo, ¿qué viene a tu mente cuando
piensas en el mar? ¿qué sensaciones aparecen? Métete en ellas. ¿Cómo notas tu
cuerpo? ¿y tu respiración? ¿cómo es ser el mar en este instante?
Cierra los ojos, sumérgete en la vivencia, tómate tu tiempo para saborear y, sin salir de
ahí, pregúntate: ¿cómo se ve tu situación o ese reto desde aquí, siendo ese mar? ¿de
qué me doy cuenta cuando lo miro inmers@ en esta energía? ¿cuál es el regalo de
verlo desde aquí?
¿Y qué siento el impulso de hacer o dejar de hacer desde esta
acciones surgen desde ahí?
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